La competencia por encontrar una vacuna para un virus extraño
Redacción/Xalapa. En esta carrera en la que diversos países se encuentran por encontrar una vacuna que por fin deuna salida a la pandemia de COVID-19 que azota al mundo, es necesario precisar algunas cosas. El nombre del virus es SARS-CoV-2 y la enfermedad que produce es la conocida Covid-19, esto nos quiere decir que una persona puede tener el virus pero no la enfermedad, tal es el caso de las personas con VIH/Sida; Una individuo con VIH es un portador que posé el virus «inactivo», éste no tiene Sida, Sida es la manifestación del virus, la enfermedad.
Gracias a este comportamiento característico de algunos virus hace que surjan los «enfermos asintomáticos» de los cuales hemos escuchado a lo largo de esta pandemia, aunque esto es una imprecisión; una enfermedad es la manifestación física del virus, así que la palabra «asintomático» es una contradicción.
Lo que realmente se intenta decir es que hay personas que son portadoras del virus SARS-CoV-2 pero no tienen Covid-19, ya sea por su sistema inmunológico resistente, su estilo de vida saludable o simplemente que el virus aún no se a activado en su organismo; éstas personas no han pasado a la enfermedad, por ello la insistencia del distanciamiento social.
Las empresas farmacéuticas han cobrado relevancia desde hace algunas décadas, tanto de forma económica como social, y ahora distintas potencias y países del todo el mundo han enfocado su vista en dichas empresas, tal es el caso de EEUU con Moderna, en su búsqueda por fabricar una vacuna eficiente contra el Covid-19 la enfermedad.
Dichas empresas pueden obtienen recursos de 3 formas: por subsidio gubernamental, las acciones en el mercado financiero y el precio de un producto de patente.
Esto por supuesto ha caído en la politización, siendo el primero que encuentre una vacuna «viable» el que tenga prestigio y poder en el mercado de la misma.
Según la OMS en la actualidad hay 160 vacunas de las cuales sólo 5 (entre las cuales no figura la rusa) en etapa 3 de pruebas.
Para que una vacuna salga al mercado tiene que pasar por muchas fases, en las cuales por supuesto hay muchos errores y esto toman tiempo.
Por ello se cuestiona que el presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, diga que tendrá una vacuna para el 3 de noviembre (día de la elección presidencial de ése país en donde él busca reelegirse).
En tanto estas disputas políticas por la validación de una vacuna, acerca de su funcionamiento y distribución, los profesionales de la salud insisten que la mejor manera de cuidarse sigue siendo las medidas adoptadas por el distanciamiento social.